Con un clima cada vez más agradable y algunas provincias que empiezan a aliviar las restricciones relacionadas con COVID-19, muchos andaluces han estado deseando ir a su campo de golf favorito y disfrutar del juego que aman. ¿Pero qué pasa si experimentan dolor o molestias en su swing de golf?
Aunque el golf es un juego de bajo impacto, es muy común que los golfistas desarrollen lesiones, ya que casi el 50% de todos los golfistas amateurs reportan al menos una lesión por año. Esos índices pueden aumentar con los individuos que juegan más frecuentemente o que tienen una biomecánica inferior.
La fisioterapia puede mejorar su juego de golf. Los fisioterapeutas no sólo pueden ayudar a manejar varios tipos de lesiones que pueden estar limitando su rendimiento, sino que también puede crear un programa de ejercicios adaptado a sus necesidades para mejorar potencialmente sus habilidades.
Entrenamiento de fuerza y pliometría
Apuntar a la movilidad, estabilidad y fuerza de las articulaciones y la musculatura del tronco, las caderas y los hombros son fundamentales para mejorar el swing de golf. Los estudios han demostrado que el entrenamiento de fuerza y la pliométrica (ejercicios explosivos) centrados en estas áreas pueden mejorar la velocidad máxima de los brazos y la mano que conducen el swing de golf, la velocidad de la cabeza del palo y la distancia de la pelota.
Un ejercicio que puede observar es el lanzamiento rotativo de la pelota medicinal, que apunta a las articulaciones y músculos deseados mientras imita el componente rotativo explosivo de un swing de golf. Esto se transfiere perfectamente a tu juego de golf!
Pruebas recientes han demostrado que mejorar la fuerza de agarre con el uso de empuñaduras de grasa también puede beneficiar tu juego de golf, ya que realizar un entrenamiento de resistencia con empuñaduras de grasa alrededor de los mangos de la barra puede mejorar la velocidad de la pelota, el transporte, la distancia de conducción y la fuerza de agarre de la mano izquierda.
La mejora de la fuerza de los antebrazos y las muñecas tampoco dañaría el swing de golf porque la transferencia de energía que se origina en las caderas y el torso debe pasar por los antebrazos y las muñecas en el camino hacia la cabeza del palo.
Fisioterapia para lesiones de golf
El golf requiere fuerza, flexibilidad, potencia explosiva, resistencia y habilidad atlética. Con el tiempo, estas fuerzas pueden causar diferentes lesiones, que generalmente afectan a áreas como los hombros, los codos, las muñecas, las caderas y la parte baja de la espalda. El impacto del golf en el cuerpo puede variar enormemente dependiendo del tipo de swing, la postura, el nivel de aptitud física y otros factores. Un fisioterapeuta puede evaluar su condición y desarrollar un plan de tratamiento personalizado para usted. Si experimenta dolor en la parte baja de la espalda u otros problemas después de jugar al golf, consulte a un fisioterapeuta.